La cartomancia es el arte de la adivinación más antiguo que existe en nuestro días. Consiste en la lectura de cartas para predecir el futuro. La misma puede realizarse con una bajara de naipes u otro tipo, para la más famosa para realizar esta acción es el tarot.
En momentos de incertidumbre por saber lo que nos va a pasar es cuando acudimos a la ayuda que nos brida el tarot. Proporciona, en sus cartas, predicciones sobre lo que nos va a suceder en el camino de la vida. Una forma segura y eficaz de consultar las cartas del tarot es a través de Internet, por medio de páginas que facilitan el acceso a la mismas, como Tarcano.
En la actualidad, algunos estudios descubre que la cartomancia tiene una asociación fuerte con los arquetipos del inconsciente que definió Carl Gustav Jung. Por eso, es posible que se pueda aplicar en campos como la psicología o la psicoterapia.
Las formas más usuales de emplear la cartomancia se realizan a través de las cartas del Tarot, que consiste en 78 cartas. Entre ellas, se encuentran los palos - oros, bastos, copas y espadas - y los Arcanos Mayores y Menores. Sin embargo, también, en otras ocasiones se utiliza la baraja de cartas española, y el Oráculo que puede tener cualquier número indefinido de cartas.
La cartomancia y su interpretación
El símbolo que nos aparece en cada carta permite la interpretación de las mismas. Estas deben hacerse con el objetivo único de ayudar a las personas a obtener respuestas. El tarot se diferencia en las otras cartas en que el primero busca que los consultantes se encuentre con ellos mismos dentro de las cartas, mientras que las otras difieren en que tiene propósitos que pueden llegar a ser variados.
La cartomancia tiene en cuenta todos los aspectos de las cartas, de esta manera realizamos una interpretación adecuada de ellas. Los elementos que las componen, como colores o los símbolos que tienen representados, forman parte de la interpretación y hay que observarlos detenidamente. Varían según en la posición en la que caigan, si rectas o a la inversa. Es decir, una misma carta puede tener diferente significado si cae de una manera u otra.
Los procedimientos de interpretación de la cartomancia son diferentes, y abarcan: el procedimiento del magnetismo, el de concentración y el de intución.
Magnetismo
Es el más antiguo que ha sido empleado, fácil de utilizar y con una manera muy práctica de realizar.
Consiste en emplear el magnetismo de las cartas. Esta se canaliza por la persona que nos las va a leer - el pronosticador- con su poder cartomántico. Solo el propietario de las cartas puede utilizar las mismas para la adivinación, ya que ha adquirido una conexión con las mismas.
El pronosticador saca las cartas con un orden, el cual se utilizará para la lectura de las mismas. Aquí entra en juego la clarividencia para interpretar el significado de esas cartas.
Concentración
Este método no se emplea regularmente, ya que solo los pronosticadores muy experimentados pueden utilizarlo porque tiene un nivel de exigencia y de concentración difícil de conseguir. Deben tener la mente limpia, sin ningún pensamiento en ella que pueda interrumpir su conexión.
El fundamento de esta práctica es que las imágenes acudan a su mente, y con la ayuda del pronosticador, se obtenga el resto para estructurar la predicción.
Intuición
Requiere mucha practica y un nivel bastante alto. El vidente tiene el deber de interpretar las visiones de una manera correcta conforme le empiecen a llegar a su mente. Suelen presentarte, además, visiones y sensaciones paranormales que ayudan a que la predicción continúe. No todos los pronosticadores controlan esta forma de lectura, ya que se necesita un gran dominio y experiencia.