Como todo hijo de vecino, paso muchas horas en las redes sociales, y en Instagram, la cuenta “diccionariovip” ha publicado una palabra muy curiosa que me ha inspirado para escribir la columna de este mes: hygge.
Hygge es una palabra danesa que significa “hallar la felicidad en las pequeñas cosas”. Me ha parecido una palabra preciosa, que creo que todos deberíamos aplicar todos los días. Sí, suena muy romántico, pero te aseguro que es posible.
Si eres lector habitual sabrás que soy PAS, y por ello tengo tendencia a sufrir ansiedad. Una de las cosas que me palia esta ansiedad es precisamente de lo que os hablo, hygge, bajar a mi cuerpo, estar presente al 100% en el momento que estoy viviendo. Por ejemplo: cuando me tomo un café con una tostada de jamón y tomate, procuro no tener muchos estímulos alrededor como la televisión, el móvil, etc, y centrarme en el olor y sabor del café y del momento.
Así de primeras, parece una tontería pero te juro que a mí me da la vida.
Uno de mis momentos favoritos es cuando me ducho con la antorcha colocada arriba, o efecto lluvia que dicen los modernos. Otro de mis momentos favoritos para hallar esa felicidad en las pequeñas cosas es cuando hago ejercicio y solo me centro en la música y en mi cuerpo.
Por ejemplo, el otro día fui a casa de una prima mía que hace poco ha dado a luz, y había preparado ensaladilla. Yo me unté la ensaladilla en mi trozo de pan, y me dice mi prima: tengo salmón ahumado por si se lo quieres poner encima. Yo coloqué el salmón encima de la ensaladilla y fui la persona más feliz del mundo, primero porque AMO el salmón, segundo porque ADORO la ensaladilla, TERCERO porque estaba en buena compañía, pero CUARTO y más importante porque me propuse disfrutar ese momento y centrarme en lo jodidamente bueno de cada bocado de ensaladilla con salmón.
Porque querido amigo lector, la felicidad no es un momento, la felicidad no es que nos pasen cosas buenas, la felicidad es un estado mental, una predisposición para el disfrute, la alegría y ver el vaso medio lleno en vez de medio vacío. Yo lo he aprendido a las bravas, ¿y tú? ¿Experimentas la felicidad a diario? ¿Practicas el hygge?
Como dice la gran tiktoker murciana “marilarat”: “pa’ reflexionar…”
Así que os dejo reflexionando y nos leemos el mes que viene… ah y no te olvides de sonreír :)