¡Hola! ¿Cómo estás? Espero que el verano vaya genial. En verano solemos estar rodeados de familia, familia política y amigos. Y hoy quiero hablar del concepto familia. ¿Qué es familia? ¿Tenemos idealizada la institución de la familia? ¿Debemos perdonar todo a la familia? ¿Es la familia incondicional?
¿Cuántas veces has oído a algún amigo decir algo como “uff mañana tengo comida familiar, qué peñazo”? ¿Por qué tenemos que vivir esos “peñazos” y esos momentos incómodos? ¿Tenemos que aguantar a todo el mundo solo por compartir sangre o apellido? ¿Si no nos apetece nada ir tenemos que ir solo porque es familia?
Creo que hemos santificado o idealizado el concepto familia, y en muchos casos familias nada bien avenidas se ven obligadas a juntarse y hacer “paripés” domingos, cumpleaños y fiestas de guardar por el simple hecho de ser familia. Creo que la familia verdadera no es aquella que comparte tu sangre o apellidos, sino la que está de verdad, la que es incondicional y la que comparte tus penas y alegrías. Creo que puede ser más familia un amigo que un tío, padre o abuelo. Creo que el simple hecho del apellido no justifica tratar mal a tu prole y quedarte a gusto, porque como sois familia no pasa nada.
Creo que nos puede más el qué dirán y las apariencias que los sentimientos. Si no aguantas a tus abuelos porque no te comprenden ni hacen por comprenderte y siempre te critican, ¿por qué vas todos los domingos a comer? ¿esos domingos los disfrutas o son un suplicio? No te digo que los borres de tu vida, pero sí que pongas límites, que empieces a discernir dónde acaba el compromiso y dónde empieza el cariño, dónde te sientes amado y respetado y dónde lo pasas mal o te sientes juzgado. Creo que nuestro tiempo es oro y debemos pasarlo con las personas que nos hagan sentir bien, en paz y amados, y pasar el tiempo justo y necesario con las personas que nos hacen sentir incómodos, nos juzgan o simplemente nos aburren.
Para terminar te dejo un texto de prosa poética titulado “Familia”, de mi primer libro -Amor, desamor y otras cosas-, para que se lo dediques a ese primo, hermano o amigo que de verdad es familia para ti:
Familia no es apellido,
familia es amor incondicional,
tú eres mi familia ahora y para siempre,
tú eres mi hogar y mi refugio,
cuando dé miedo fuera
y cuando brille el sol,
yo soy tu roca, cuando estés cansado,
soy tu hombro cuando debas llorar,
yo soy tu refugio y tu hogar,
el lugar donde puedes descansar,
familia no es compromiso,
familia es cariño y respeto,
Tú y yo,
incondicional,
para siempre
por siempre jamás.
Hasta el mes que viene, y recuerda: no dejes de sonreír.
¡Feliz verano!