Con el verano ya casi llegando a su fin comienza la temida vuelta al cole para pequeños y no tan pequeños. La vuelta a la rutina puede ser motivo de estrés para niños y padres, pero son estos últimos los que tienen que evitar transmitir esta ansiedad a los pequeños, puesto que para ellos, el cole debe verse siempre como algo positivo. Por ello, en este post te vamos a ayudar a afrontar la vuelta al cole, para que no se convierta en un handicap para los niños.
Afrontar la vuelta al cole tras las vacaciones
La palabra es adaptación. Igual que los mayores necesitamos un periodo de adaptación para pasar de estar de vacaciones a trabajar, los más pequeños de la casa también lo necesitan. Empezar a adaptar horarios antes de que comience el curso puede ser el primer paso para que esta adaptación sea más progresiva, sobre todo si hablamos de niños pequeños.
Todos los expertos recomiendan que los padres sean positivos delante de los niños. El colegio no puede suponer un problema, tiene que ser un lugar agradable en el que se aprenden cosas divertidas. Y desde que comienzan a ir a la escuela infantil hay que transmitirles esta sensación. La sensación de que ese lugar donde se deja al más pequeño es seguro, donde no corren ningún peligro y donde harán amigos y se lo pasarán bien. Esas son las premisas que todo padre debe transmitir a sus pequeños frente a la escuela.
7 consejos para afrontar mejor la vuelta al cole
1. Adaptarse a la rutina
Como ya hemos comentado, la adaptación al colegio será más fácil si se van adaptando los horarios durante la primera semana antes de empezar. Intentar comer a las horas en las que se hará en horario escolar, madrugar un poco más cada día o hacer la ducha antes de dormir para relajar a los más pequeños son algunos de los consejos para que el cambio no sea tan fuerte.
2. La comunicación es básica
Hablar con tu hijo para ver qué le preocupa de la vuelta al cole e intentar que se sienta lo más seguro ante el colegio es esencial para que el niño lo afronte de forma normal. Se trata de concienciar poco a poco al pequeño en que comienza una nueva etapa y los cambios respecto a las vacaciones que conlleva.
3. Emociones compartidas
Los padres deben transmitir a los niños seguridad y que confían plenamente en los profesores. Si esto no es así, y los padres se sienten ansiosos, sobre todo los primerizos, los niños lo captarán y será peor para ellos.
4. Despedidas rápidas
Sobre todo con los más pequeños, los padres pueden pasarlo mal los primeros días cuando dejan a sus hijos en el colegio o escuela infantil. Pero éstos tienen que saber que van a estar seguros y que es un trago por el que hay que pasar. Para evitar mucho drama lo mejor es que la despedida sea rápida, optimista y cariñosa. Y aunque el niño llore, eso es normal en los primeros días. Dejarlo en un entorno desconocido para ellos le provoca desconcierto, pero los padres no deben reforzar esta inseguridad, sino todo lo contrario, normalizar la situación.
5. Dar autonomía al pequeño
Es muy importante inculcar la autonomía en los niños. Hacerlos independientes a la hora de ir al colegio los ayudará en el desempeño de sus actividades diarias, y eso debe reforzarse en casa.
6. Interesarse por el día del niño
Involucrarse en el día a día de los más pequeños es parte de la comunicación que debe fluir entre padres e hijos. Escucharles con atención, comprenderles, interesarse por ellos y ayudarlos si tienen alguna dificultad es esencial para hacer más llevadera la adaptación a la rutina.
7. Celebrar los triunfos de cada día
No vale celebrar solo el final de curso, porque cada día es un triunfo. Los niños se esfuerzan cada día y hay que darles a entender que estamos orgullosos de ello. Ir al parque, una merienda especial... todo para que se sientan especiales y se sigan esforzando.