La taiga siberiana es un lugar remoto y frio, sus temperaturas llegan a menos cero. En este lugar parece nada habita, fue hasta 1978, donde unos geólogos descubrieron algo que no se esperaban.
En ese lugar, uno de los más lejanos de la civilización en el mundo, encontraron a una familia de ermitaños. Tanto así, que habían vivido apartados del mundo desde hace muchos años.



