El dictador chavista Nicolás Maduro aseguró este miércoles que Venezuela quiere “tener las mejores relaciones con toda Europa”, tras declarar persona no grata a la máxima representante de la Unión Europea en el país caribeño, pero señaló que no pueden aceptar las sanciones contra altos funcionarios.
“Nosotros no hubiéramos querido hacer esto, lo hacemos en contra de nuestra voluntad, inclusive porque nosotros queremos tener las mejores relaciones con toda Europa”, dijo Maduro en un acto televisado. “Pero no podemos aceptar que nadie venga a agredir a Venezuela, a sancionar a Venezuela”.
“O ustedes rectifican o con ustedes no hay más nunca ningún trato, de ningún tipo, ningún tipo de diálogo señores de la Unión Europea, para que lo sepan, Venezuela tiene dignidad”, alertó.
La embajadora amenazada
La Unión Europea pidió este jueves al régimen venezolano que “revierta” su decisión de obligar a la embajadora de la UE en ese país, Isabel Brilhante, a abandonar Venezuela en 72 horas.
“La UE lamenta profundamente esta decisión que no hará más que aislar a Venezuela internacionalmente. Pedimos que se revierta esta decisión”, dijo a EFE la portavoz del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), Nabila Massrali.
El régimen venezolano declaró este miércoles persona non grata a la embajadora a Brilhante y le dio tres días para abandonar la nación en respuesta a las sanciones que el lunes aprobó la UE contra 19 diputados de la Asamblea Nacional, la judicatura y el Comité Nacional Electoral de Venezuela, en respuesta a los comicios del 6 de diciembre que la UE no reconoce.
El parlamento chavista
El ministro de Exteriores del régimen venezolano, Jorge Arreaza, se reunió este miércoles con la embajadora europea para comunicarle la decisión, después de que ayer el parlamento de mayoría chavista pidiese la expulsión de Brilhante por considerarla persona no grata.
La portavoz del SEAE dijo que “Venezuela solo superará su crisis actual a través de la negociación y el diálogo, al que la UE está completamente comprometida”, pero añadió que la decisión de hoy “socava” esa voluntad de cooperación.
El 29 de junio de 2020, Maduro ya ordenó a Brilhante la salida del país, una decisión que revocó el 2 de julio, con la esperanza de que la decisión facilitara el diálogo entre la UE y Venezuela. Aquella decisión también estuvo precedida de otra ronda de sanciones a Venezuela por parte de los países de la Unión Europea.
La dictadura de Maduro expulsó a la embajadora de la Unión Europea: le dio 72 horas para salir de Venezuela
El régimen de Nicolás Maduro ordenó este miércoles la expulsión de la embajadora de la Unión Europea, Isabel Brilhante, a quien le dio 72 horas para abandonar el territorio venezolano, en represalia contra las últimas sanciones del bloque a 19 funcionarios del chavismo.
“Por decisión del presidente Nicolás Maduro, le hemos entregado en sus manos, a la señora Isabelle Brilhante; quien en los últimos años fue la jefa de la delegación de la Unión Europea, en Venezuela; la declaratoria como persona no grata”, indicó el canciller Jorge Arreaza en conferencia de prensa.
En la víspera, la Asamblea Nacional, aprobó un “acuerdo de repudio” contra las sanciones y planteó “exhortar” al Poder Ejecutivo a expulsar a la diplomática.
Las últimas sanciones afectan, entre otros funcionarios, a Remigio Ceballos, uno de los principales jefes militares de Venezuela; Indira Alfonzo, jefa del Consejo Nacional Electoral; y a dos congresistas. Maduro amenaza a la Unión Europea: “O rectifican o con ustedes no hay más nunca ningún trato”.
Fueron implementadas en reacción a las elecciones parlamentarias del pasado 6 de diciembre; boicoteadas y calificadas de fraude por los principales partidos políticos de oposición y desconocidas por Estados Unidos; la Unión Europea y varios países de América Latina. Dicha votación dio al partido del gobierno y sus aliados 256 de 277 escaños.
La oposición local
Por su parte, la oposición local había advertido por los posibles efectos de la medida, sosteniendo que podría causar la suspensión inmediata de programas de ayuda humanitaria.
“Esto sólo aislará más a Maduro y recibirá un enérgico repudio del mundo libre. La presión democrática internacional es una respuesta a la destrucción de las libertades en el país, al empeño de impedir elecciones libres. No cesará hasta tanto no se restablezca la democracia”, indicó Julio Borges, coordinador de Primero Justicia.
Venezuela se convirtió en 2017 en el primer país latinoamericano sancionado por la UE, que desde entonces ha aprobado medidas contra 55 funcionarios venezolanos, que incluyen la prohibición de viajar a su espacio y la congelación de activos.
Es la segunda vez desde junio de 2020 que Venezuela expulsa del país al representante del bloque por sanciones aplicadas por la UE. Maduro amenaza a la Unión Europea: “O rectifican o con ustedes no hay más nunca ningún trato”.
A mediados del año pasado, sin embargo, Caracas dejó sin efecto su decisión luego de contactos sobre la necesidad de mantener las relaciones diplomáticas. Esta vez, Arreaza argumentó: “Hemos hecho todos los esfuerzos (...) para estabilizar la convivencia democrática en el país y de nuevo sanciones, entre comillas, contra magistrados, contra el poder judicial, contra el poder electoral. Es de verdad inaceptable.
Generoso fue el presidente Maduro al haber permitido que en Venezuela permanecieran los jefes de misión y las misiones; incluso, de los países de la Unión Europea, cuando en febrero del año 2019, le desconocieron”. Esta última decisión de no legitimar a Maduro ocurrió tras la polémica reelección de 2019.
Maduro amenaza a la Unión Europea: “O rectifican o con ustedes no hay más nunca ningún trato”