Las organizaciones de defensa animal AnimaNaturalis, CAS International y NAC, han realizado este domingo una protesta conjunta en la Plaza Mayor de Madrid contra la futura Ley de protección animal y para exigir la salvaguarda de los derechos de todos los perros, sin excepción.
Según las tres entidades, "el Ministerio de Agricultura, Pesca y Alimentación está presionando para excluir a los perros utilizados en la caza de la próxima Ley de Protección y Derechos para los Animales, por considerarlos meras herramientas de trabajo". Pero tampoco "desea limitar la cantidad de animales en una rehala o que deban ser esterilizados para evitar abandonos", ponen de ejemplo.
Las asociaciones animalistas han pedido protección igual ante la ley para los perros utilizados en actividades de caza, sean deportivas o cinegéticas.
Alegan que las rehalas de perros (grupos de perros de caza mayor) pueden concentrar a "decenas de individuos en las condiciones más precarias", pues "se les obliga a reproducirse para mantener camadas jóvenes y aptas para la actividad, se desecha a los mayores y a aquellos que no cumplen con las especificaciones necesarias para cazar". "No existe control ante esta actividad ni fiscalización por parte de las autoridades", señalan.
Y critican que tanto los cazadores como el propio ministro Luis Planas parten de la premisa de que estos perros "no son animales de compañía y por lo tanto no tienen que ser objeto de la ley".
Según los animalistas, las únicas restricciones al sector que pretende incluir la nueva Ley de Protección Animal es la exigencia de núcleo zoológico para todas las perreras que alberguen más de 5 perros --con el fin de que puedan ser fiscalizados con periodicidad por los funcionarios veterinarios-- y que se deba esterilizar a los machos si es que conviven con hembras en la misma rehala --con el fin de evitar y reducir los abandonos--.
"A estas modificaciones en su actividad se oponen rotundamente, anunciando que sería el fin de la caza y la pérdida de millones de trabajos. Sin embargo, se trata sólo de mínimos que también se aplican a otros lugares donde se concentran animales, como refugios, perreras y otros lugares sin licencia especial de criadero", exponen.
"Hace 40 años, la consideración de los perros de caza y otros animales era muy distinta a la de hoy en día, por eso exigimos que se controle con mayor rigor el bienestar de esos animales y tengan los mismos derechos que aquellos que viven dentro del hogar", expresa Jaime Posadas, coordinador de AnimaNaturalis en Madrid.
Tal y como comenta, "excluir a estos perros de la Ley de Protección Animal sólo porque existe un beneficio económico pone en entredicho las prioridades que pone este gobierno sobre la vida y el sufrimiento de los seres más indefensos que existen en la sociedad, que son los animales", advierte.