El popular musical The Hole ha aterrizado en el Teatro Circo de Murcia y sus protagonistas reciben a Murcia Noticias para contarnos sus experiencias
Canco Rodríguez: “Dejad de planificar porque la vida se puede ir a la mierda en un momento”
Casi sin tiempo a conectar mi grabadora, Vinila Von Bismark, la Generala, se arranca como si ya estuviera en plena representación, con una canción al estilo musical de la película Pepi, Luci, Bom y otras chicas del montón, del genial Pedro Almodóvar, versionada al murcianico para esta ocasión.
El espectáculo The Hole acaba de aterrizar en Murcia, en el Teatro Circo y permanecerá en sus “angares” hasta el próximo 12 de junio. Tengo claro que la entrevista promete. Aun así, reconozco que el folio donde llevo esbozadas algunas preguntas para que la timidez no me gane, tiembla. Impone, aun no estando del todo caracterizados para su espectáculo, sentarte frente a tres pedazo de actores con alma de quitapenas y gurús del carpe diem y tempus fugi. Porque como bien dicen, la felicidad no se puede sujetar.
Que comience el espectáculo de insinuaciones picaronas, risas incontenidas y desparpajo a raudales de Almon (Julio), la Generala (Vinila) y el Maestro de Ceremonias (Canco). Y recuerden: lo que pase en esta entrevista, se queda en esta entrevista. Tan solo les estará permitido compartirla con quien más pudor le pueda dar. Que comience la función.
- Julio, Vinila, Canco, daros lo primero de todo la bienvenida a Murcia. Primera pregunta: ¿qué va a experimentar el espectador una vez sentado en su silla aparte de nervios?, porque sois imprevisibles.
- Vinila. ¿Te has dado cuenta? (risas).
-Canco. Van a experimentar, van a pasar por una montaña rusa de emociones (Vinila suelta una carcajada cómplice), se van a reír mucho, se van a emocionar, si tienen empatía por los artistas van a sufrir mucho porque les van a dar miedo los números aéreos, si les gusta la danza van a ver coreografías impresionantes, striptease, erotismo a rabiar y sobre todo, creo que se van a ir a casa con un mensaje claro: dejar de planificar porque la vida se puede ir a la mierda en un momento, llámalo X.
- Me has leído la siguiente pregunta: ¿hay que dejarse la timidez cuando vienes a The Hole?
Julio. No, la puedes traer sin ningún problema. Ya te la quitaremos nosotros. Claro, ahí, apoyando que vengan (risas).
V- Y sin vaselina.
C- No, no, que vengan a gusto. Si aquí se lo van a pasar bien. Que nadie venga con miedo. Al revés, que vengan con su timidez, que vengan con su desparpajo, con lo que coño sea que justamente lo que le vamos a decir es “sé tú y siéntete feliz como tú eres”.
J- y no se obliga a nada a nadie.
C- Claro.
V- Puede ser que la gente no quiera entrar, pero tú no vas a querer salir luego.
- ¿Qué vamos a ver de distinto en Murcia a lo que ya habéis representado en visitas anteriores?
C-Se va a ver un espectáculo nuevo. Pero hay una cosa que yo creo que estamos obligados a que vuelva a ocurrir y es que la gente siga sintiendo. Parece algo tan sencillo, pero a la vez en el día a día que llevamos es muy complejo sentir. Estamos viviendo una vida que cuanto más frío y menos te plantees las cosas, mejor.
Mejor para algunos, porque para nosotros es una mierda de vida. The Hole X lo que te hace es zarandearte, que vuelvas a testearte tú mismo, que vuelvas a reírte, que vuelvas a emocionarte. Yo firmaría porque vuelva a ocurrir lo mismo que ocurrió hace 10 años cuando se estrenó The Hole: que la gente sienta.
Integrantes del espectáculo The Hole X. Fotos: Fermín Meseguer
- Vinila, ¿qué quieres generar en tus espectadores, en tus fans?
V - Que se lo pasen bien, que se diviertan, que se olviden de la vida por un segundo y que vivan un presente como el que se vive en este espectáculo, ¿no? ,que te da ese mensaje y te dice que hay que estar en el agujero para salir del agujero. Que no por estar en el agujero nos vamos a morir, no. Y te hace tener otra visión de la vida, eso es lo que le digo al espectador, que venga, que se lo va a pasar muy bien.
- Julio, ¿qué visión tenemos nosotros, los “mortales” de la vida con respecto a la del show? ¿Qué estamos haciendo mal?
¿Qué estáis haciendo mal los “mortales”? Nada. Lo que hay que hacer es nuestra oda, vivir. ¿Qué es bien y qué es mal? ¿Quién dicta eso? Aquí nosotros no estamos para juzgar. Nosotros aquí estamos para que la gente se lo pase bien y para que disfrute.
C - Y alguna preguntilla que se le lanza para que ellos la reflexionen en casa.
C-¿Eres feliz? Porque esta pregunta te la harás hoy, te la harás mañana con el siguiente espectáculo, porque al final la cosa es que la gente venga al teatro. Ojalá que vengan a vernos a nosotros y nos hagamos millonarios pero, sino, que vayan a ver teatro porque al final el teatro no te dice lo que tienes que hacer. Te lanza preguntas para que tú busques las respuestas y reflexionar sobre la vida que estás llevando y si eres o no feliz.
- Se os ve seguros, con desparpajo en esta entrevista, pero ese segundo antes, durante o después de estar arriba del escenario; alguna manía tenéis que tener
J- Yo tengo muchas manías. Tengo que salir al escenario con el pie derecho. Siempre. Y cuando una canción no me la sé bien (risa grupal) que no es el caso de aquí, pero por ejemplo en The Hole 1 salí a cantar un cumple y lo tenía que decir 3 veces con la voz muy rápida y si interrumpían o me salía mal la letra por lo que sea, tenía que volver a empezar, antes de salir.
- ¿Nunca has echado a alguien de la butaca por interrumpirte? (pregunta recurrente)
J-(risas). No. Manías tenemos todos, creo antes de salir a escena (Vinila hace hilo diciendo que tiene otras). Todos tenemos TOCS antes de salir al escenario: revisarse el maquillaje, el calzado, la media, que no me he mirado el culo. Pero es que vosotros también. Antes de salir de casa seguro que os miráis algo: si estáis bien peinados. Siempre. Hombre, salimos a darlo todo y queremos estar lo mejor posible.
V- La mía es buscar mis bragas que nunca las encuentro en el escenario. (carcajadas de nuestros protagonistas y algún presente en la entrevista).
J- Es un grito que se oye mucho en los camerinos: ¡¿dónde están mis braaagass?!
- Esta pregunta me la he reservado para Vinila: si tus tatuajes hablasen, ¿qué nos dirían?
V-Esto es como la biblia de Vinila, ¿sabes? Todo lo que llevo tatuado es pura historia de mi vida.
- ¿Algún capítulo confesable?
V-¿Confesable? Mira, esta monja que llevo aquí esto es de un colegio de monjas que estuve desde chiquitilla que siempre dije: o sales mujer de vida alegre (suavizo el término por si estamos en horario infantil) o sales monja. Y mira. Todos tienen su historia.
J- Y monja no salió (risas).
- ¿Os gusta lo que hacéis, o hacéis que os guste?
C - A mí me apasiona. A mí me gusta lo que hago. Sobre todo porque uno cree que lo que cuenta, tiene que contarlo. Cuando tú haces un trabajo que no te gusta es porque crees que lo que haces no vale pa ná. Y yo cada vez que piso el escenario creo que el mensaje que mando es necesario que se oiga. Tan simple como esto de “¡sé feliz!”. Si alguien se lo dijera cincuenta mil veces cada día que se levanta, acabaría siendo feliz.
V - A mí también. Si no no llevaríamos más de 10 años en estas tablas.
J - Si no, yo creo que no lo haríamos. A veces cuesta, por supuesto pero porque nosotros también somos seres humanos. Imagínate que nos sucede algo en la vida personal como la muerte de un familiar, que ha ocurrido, y en ese momento tienes que salir a escena. Es muy duro, pero lo tienes que hacer. Por supuesto que nos gusta y nos apasiona, sino, no estaríamos en ello.
- Anécdota inconfesable de estos años al frente de The Hole. ¿O quitamos el in?
V - ¡Uh!, yo tengo una (sonríe): pero no la puedo decir.
C - ¡Pero si son inconfesables! (sonríe)
J - Hay cosas que no puedo contar. (Vinila contesta que ella tampoco). El espectador no se ha dado cuenta en alguna ocasión. No la puedo contar que quedo fatal. A mí me han pasado muchas cosas. Cosas graciosas pues, yo qué sé, desde caerme con la bola y no poderme levantar, no salir ningún compañero a ayudarme, entrarme la risa, al teatro le entra la risa (Vinila y Canco ríen a la vez que Julio cuenta la anécdota), yo no poder cantar, la música sigue, no me puedo levantar, intentar pedir ayuda así (sonido gutural de agobio), nadie sale, me tiro de lado, me pongo como una cucaracha, no me puedo incorporar; así durante los cinco minutos de la canción hasta que el regidor dijo “¿por favor, alguien puede salir a ayudar a Julio?”. Lo pasé fatal.
Y luego otras tantas sobre todo de llorar de risa. Muchas. Nosotros nos lo pasamos muy bien. Yo creo que se percibe. Hay momentos muy divertidos en el show que entre nosotros no nos podemos mirar por esto. Porque nos reímos.
V - Somos una compañía muy familiar.
C - O intentas hacer gracia a tu compañero sin que lo note el público, porque al hacer gracia al compañero esto está vivo, sino se convierte en una rutina. Intentas “pinchar” al compañero para que aguante el tipo y al final eso hace que aquí arriba, en el escenario, haya chispas.
- Vinila, antes has hecho hilo a esta pregunta: ¿cómo llegasteis cada uno de vosotros a esta familia artística?
V - Pues yo llegué sin vaselina (risas).
C - Ni epidural.
V - Ni epidural ni pollas. A mí me dijeron: “tú pa dentro”; dije: pues vamos allá. ¿Hace cuanto?. 11 años.
J - Un 15 de agosto empezamos a ensayar en Argos en Madrid. Yo llegué del Plata, trabajaba allí con Bigas Luna en Zaragoza y se presentaron allí y me dijeron: “¿te quieres venir a Madrid?” y de la mano de Paco León, tonto sería si hubiese dicho que no. Entonces hablé con Vigas y me dijo: “me fastidia mucho que te vaya de aquí pero entiendo que te vayas a Madrid”. Y me fui, y aun estoy aquí (Julio utiliza un tono sollozante humorístico al final).
- Voy a hurtarle la pregunta a Canco: ¿qué os hace feliz?
C - Yo no soy muy complicado. A mí mi hijo. Así de simple. Es verdad. Uno se empieza a dar cuenta de la felicidad cuando la siente de verdad. Que guay que la vida te vaya dando cosas según vas avanzando que te hace decir ¡ahora soy feliz! Antes no, ahora sí. Ahora es mi hijo y dentro de 10 años ya veremos lo que es; espero que siga siendo mi hijo (sonríe). Que no diga “¡estoy hasta los huevos de él!”
J - No me hagas llorar Canco.
V - No sé, a mí me hacen felices muchas cosas al cabo del día. La gente se pasa mucho tiempo esperando la felicidad, y eso nunca va a llegar. Puedo ser feliz mirando una piedra, mirando una planta, estando en mi rancho con mis perros. Cada vez soy más consciente de ese presente y de ese encontrar la felicidad cada vez que yo la quiero. También hay momentos un poco más de oscuridad, que me gusta estar más retraída. También disfruto de la tristeza. También hay que dejarse.
No todo va a ser high, todo va a ser feliz. Hay que saber disfrutar de ambas cosas pero eso te hace darte cuenta y ser consciente que la felicidad está cuando tú la quieras. No es algo que nos viene ni algo que dejamos, sino algo que encuentras realmente cuando tú quieres y uno está disponible a ella.
C - Decía Eduardo Puntset algo así como que la felicidad es solamente el momento en el que pasa entre tus dedos. Nadie puede agarrarla. Si esperas eso, vas a ser infeliz. Tienes que disfrutar cada vez que pasa.
Julio, Vinila y Canco, integrantes del espectáculo The Hole X. Fotos: Fermín Meseguer